martes, 15 de marzo de 2011

"Y aun yo te recuerdo..."


Tendría que preparar la ropa para mañana. Levantarme temprano, desayunar, tomar el colectivo, ese que corta Rivadavia y toma Avenida Corrientes. Pero en vez de eso estoy acá reconciliandome con el pasado. El mismo que me hacia arder el pecho con odio y miedo cuando era presente.
Hace unos días me encontré con mi futuro, en el presente. Me pase como 10 estaciones en el tren. Quería, ansiaba saltearme las estaciones. Y me baje, un poco mareada, las piernas me temblaron un poco al tocar el piso. Parece estar firme.
Mañana me tengo que levantar temprano para comenzar a ver un futuro más lejano otra vez. Pero estoy acá recordando lo que me hizo SER.
Quiero que sepas que ya no pienso tanto las cosas. Me revele contra mi misma. Me perdoné. Aprendí a querer a mi padre y no pensar en los que no piensan en mi. Me acuerdo de todo, me olvido de nada.

jueves, 12 de agosto de 2010

Me retiro, espiritual.


El silencio ya no molesta,
Y las nauseas ya no interfieren.
Sin embargo de vez en cuando el eco
de las risas me distre, las oigo lejanas
y me hacen reir.
Otras veces,simplemente despejo mi mente
con un movimiento de manos,
y con un hundir de hombros me digo;
que mas dá.

lunes, 17 de agosto de 2009

LA MUERTE DE MELISANDA

LA MUERTE DE MELISANDA

A la sombra de los laures
Melisanda se está muriendo.

Se morirá su cuerpo leve.
Enterrarán su dulce cuerpo.

Juntarán sus manos de nieve.
Dejarán sus ojos abiertos

para que alumbren a Pelleas
hasta después que se haya muerto.

A la sombra de los laureles
Melisanda muere en silencio.

Por ella llorará la fuente
un llanto trémulo y eterno.

Por ella orarán los cipreses
arrodillados bajo el viento.

Habrá galope de corceles,
lunarios ladridos de perros.

A la sombra de los laureles
Melisanda se está muriendo.

Por ella el sol en el castillo
se apagará como un enfermo.

Por ella morirá Pelleas
cuando la lleven al entierro.

Por ella vagará de noche,
moribundo por los senderos.

Por ella pisará las rosas,
perseguirá las mariposas
y dormirá en los cementerios.

Por ella, por ella, por ella Pelleas, el príncipe, ha muerto.






Pablo Neruda
(1904–1973)

Crepusculario
(1919)

PELLEAS Y MELISANDA

sábado, 20 de junio de 2009

He suicidado a un ser



Sinceramente, debo decir que llegar al final del ovillo de lana roja puede ser doloroso. Ya no hay un impulso que te haga seguir. Es que ya no hay nada.
Pero de la nada conseguí mucho. Por un lado un cadáver, por otro un informe forense.
Ayer me senté a la mesa, observé a mis comensales, no eran muchos debo confesar, los mire a los ojos y dije: "Resolví el problema"
¿Cómo resolví el enigma? Me separe de mi cuerpo y pensé como el muerto, me odie a mi mismo como me odiaba el muerto, leí el diario que leía (y plagiaba) el muerto, oí al muerto, oí sus lúgubres melodías, comprendí todo, y mucho más.
Mientras regresaba a casa, Decidí que no había que velarlo, pues era un criminal. Solitario, que se aprovechaba de la benevolencia de crédulos, que sucumbían ante su imagen de Infeliz, desdichado y triste.
Después de cinco años de persecución, intentando comprender como ese ser despreciable mataba personas, fui yo quien, tan personificado y mimetizado, lo maté.
Su tumba ahora está en su propia habitación, ahí, debajo de la cama que tantos sueños absurdos generó. Lo enterré con su cuadernito lleno de textos plagiados de grandes literatos, su único par de medias, y las benditas tijeras, esas con la que desgarró tantas pieles. Esas, las mismas tijeras que le causaron la mente.
Mientras caminaba, con las manos en el bolsillo y muerto de frío, sabiendo que había yo matado a un ser comprendí todo, nuevamente, pero de manera correcta.
Lo único que busco desde su nacimiento era morir, buscaba personas que le tengan lástima y beneficiarse, tal un parásito, una garrapata.Necesitado, siempre fue un necesitado. Y yo fui quien le dio lo que necesitaba, la muerte.

jueves, 23 de abril de 2009

Se necesita un hecho, tan solo un hecho que cambie tu vida.
Ese único suceso te hace comprender tantas cosas.Se acomodan las ideas y las imágenes de tu mente, una vez que las acomodaste por orden de importancia, podes empezar a suprimir.

Suprimí ese ser nauseabundo de tu vida. Borralo, sacalo, matalo. Le haces un favor.
Perdón, te haces un favor.

Poco a poco la imagen se trasluce, hasta desaparecer.Tu pecho contraído por fin logra dilatarse.Respirás, aliviado.

No fue tan difícil entender lo ocurrido.

"Lo que es jamás dejará de ser, y lo que no es nunca será".

Mahabharata