jueves, 6 de noviembre de 2008

Yo estoy, Tu estás, pero el nosotros no está

Amaban reposar juntos después del amor, imaginando que en ese contacto pasivo recuperaban las horas perdidas, en que él la ignoraba, y ella lo velaba.
Es que las pasiones desenfrenadas llevan a finales tristes y dolorosos. Los amantes pueden poseerse mas allá de toda distancia, y con solo un pensamiento invocar al otro.
Tantos años espero ella que el amante despistado se diera cuenta de su amor, que ya no recordaba los sabores de la juventud. Desde aquella tarde de mayo en una esquina de un barrio pintoresco con casas bajas lo conoció y no pudo jamás dejar de pensar en su existencia.
Él en cambio, estaba muy ocupado con su exitosa vida, con tantas mujeres bellas y bien parecidas que no pensaba descansar hasta no tenerlas todas. Sus amores fugases en noches eternas llenas de sustancias eran mucho mas que todo.
No recuerdan el momento exacto, pero de una noche para otra ya no pudieron separarse, primero como simples conocidos, luego como una sola persona indivisible.
Sin embargo el tiempo fue pasando y las palabras nunca llegaron, ese sentimiento de unión que sentía el uno por el otro, jamás se concretó. Cada cual en su mundo amó al otro sin siquiera atreverse a arriesgar perder eso tan hermoso que los unía.
¿Vivir con ilusión, o morir con intrigas sobre lo que no fue?

3 comentarios:

Noelia Adducchio dijo...

Es como darse un chapuson! Me termino de acordar lo bueno que estuvo árbol en la peach! (por lo de chapusong)
Te voy a llamar ahorita -

Anónimo dijo...

wooooooooooowwwwwwwwwwww
q olaaaaaaa!la ola te mueve la ola te mueveeeeee!!!,,mmm que lindo me hace acordar al verano y al calor eso no me gusta....besossss no te ahogues.socia

Anónimo dijo...

DEJA DE REFREGarME QUE SABES USAR EL POTOCHOP.SOCIA